Como muchos de vosotros sabéis vengo de una familia que para mi y con vuestro permiso fueron y son "héroes" de guerra. Sí, mi padre y abuelo materno estuvieron cada uno en la guerra. Hoy solo me queda mi padre, mi abuelo el 9 de abril de este año cumpliría los 100 años pero las heridas de guerra le hicieron padecer muchísimo tiempo. Todavía recuerdo aquellas tardes donde me enseñaba aquella delgada y enferma pierna con metralla que tras operaciones y operaciones no mejoraba pero que él se negaba a cortar por orgullo y honor a la causa, eran hombres hechos de otra pasta.
Mi padre ahora con 72 años recuerda orgulloso su participación en la guerra y las medallas otorgadas al valor y a la supervivencia. Estuvo voluntario en la marina, embarcó en un buque camino a África y estuvo 3 años fuera de su hogar. Se hizo médico en aquellas largas travesías pero pronto fue escogido para luchar en el campo de batalla... esta es otra historia que ya os explicaré pronto...
Los dos fueron condecorados, aunque a mi abuelo y ya os explicaré más adelante se le dió por desaparecido en combate, es una larga y fascinante historia. De momento, ya hemos empezado el primer capítulo de esta aventura en el pasado.
Bueno, es hora de comer así que os abandono, pronto seguiremos las rutas de estos dos grandes hombres de los que he aprendido muchísimo.
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